Un breve poema, del amor de Gangrel.
rozare tus mejillas
besare tus labios
te abrazare a mí
tan fuerte que no te podrás escapar
la ira llenara mi cuerpo
me dejare llevar por la pasión
cambiare de forma
y te haré mía
desgarrare tu piel
beberé de tu sangre
nada me detendrá
en vano serán tus gritos
comeré tus entrañas
las arrojare a lo lejos
oleré tu cabello
y después te lo arrancare
morderé tu cuello
beberé toda tu esencia
me saciare con tu sangre
y beberé hasta la ultima gota
de ti solo dejare
un cuerpo irreconocible
una mancha de sangre
en un olvidado bosque
al final, gritare tu nombre
llorare mi pena, tu muerte
y maldeciré mi castigo
mi condena eterna.
Marius