Hermanos y hermanas, por el filo de la espada y el vínculo de sangre juro que la fuerza de mis brazos y el coraje de mi corazón os defenderán a vosotros y vuestra causa del poder de nuestros enemigos. Nunca estaréis solos en el campo de batalla mientras me quede aliento en el cuerpo. Si rompo mi juramento, que una lluvia de dagas de hierro atraviese mi pecho y envíe mi alma por siempre a la oscuridad.
Corte: Oscura.
Apodo: Anfitriones, Guardacalderos.
Daireann, la fundadora de la Casa, era una hábil herbolaria y sanadora, así como una vieja amante de Fionn mac Cumhaill.
El Alto Rey Adwyr ap Gwydion le concedió tierras a cambio de su servicio al curarlo de una dolorosa herida. Sintiéndose indigna al lado de los lores y damas que habían ganado sus tierras en el campo de batalla, Daireann quedó determinada a aportar grandeza a su Casa a su propia manera. Su hijo, Conchobhair, se convirtió en un poderoso guerrero de gran renombre e impecable honor. Daireann se enorgullecía de la hospitalidad de su Casa, la cual sobrepasaba hasta a la de las más rectas Casas Luminosas.
Un miembro de la Casa Daireann nunca niega refugio o comida cuando se le pide honorablemente, ni siquiera a su mayor enemigo. Igualmente, envenenar o dañar a los invitados sería lo menos hospitalario y traería el deshonor a cualquier Daireann que lo hiciera. El Daireann puede solicitar una historia o canción a cambio de su hospitalidad, pero nada que sobrepase la habilidad del huésped. Incluso durante la División, cuando los guerreros de Daireann batallaban sin cesar, la visión del estandarte de la Casa prometía descanso y refugio. Sin embargo, a partir de tan brillantes comienzos, la Casa Daireann tomó un giro más oscuro que la convirtió en la Casa que es hoy en día.
Durante la Ruptura, Conchobhair no huyó a Arcadia. Se quedó y aguantó mientras Casa tras Casa huía, y juró que las seguiría sólo después de asegurarse de que todo el mundo atravesaba la puerta. Como el capitán de un barco que se va a pique, Conchobhair vio a sus compañeros Sidhe, incluida su madre y otros miembros de su Casa, ponerse a salvo. Cuando los líderes de casa Casa atravesaron las puertas de Arcadia, juraron que, una vez hubieran acompañado a su gente, volverían a por Conchobhair. Sin embargo, cuando las puertas se cerraron, Conchobhair fue abandonado en Concordia.
Afligida por la pérdida de su hijo, Daireann juró que se vengaría de cualquiera que abusase de la hospitalidad y la ayuda de su Casa. Los Sidhe de la Casa Daireann viven de acuerdo a tres leyes: honor, hospitalidad y venganza. El honor que tanto estiman porque Conchobhair se mantuvo fiel a su palabra, incluso ante la traición.
La hospitalidad que aún ofrecen a todos los que la buscan, siempre que obedezcan las tres simples reglas de la Casa: nunca pedir más de lo que se ofrece, no causar daño a tus anfitriones ni a nadie bajo su techo y siempre hacer una oferta justa de reciprocidad. Como hacía su fundadora, muchos miembros de la Casa Daireann aún practican la herbología. Aunque sus pociones pueden usarse para curar, son mucho más conocidas por su uso como venenos. La venganza de los Daireann es lenta y dolorosa, ejercida mediante siniestras pociones que tardan días, incluso semanas, en matar a sus víctimas. A quienes violan las reglas de la hospitalidad Daireann se les suele permitir quedarse, pero sólo porque es más fácil envenenar a alguien bajo tu propio techo. La Casa Daireann aún provee descanso y hospitalidad en sus Feudos y sus casas caldero por toda Concordia, pero un buen anfitrión sólo necesita ser tan honorable como lo sea su invitado menos honorable.
Favor
La Casa Daireann se dedica a las leyes del honor, la hospitalidad y la venganza. Los miembros de esta Casa tienen –1 de dificultad en todas las tiradas pertinentes para proteger a alguien bajo su hospitalidad o cuando llevan a cabo una venganza contra alguien que ha violado ésta.
Defecto
Los miembros de la Casa Daireann no pueden volverle la espalda a alguien que busca refugio o asilo, ni siquiera a un enemigo mortal, a menos que esa persona viole las leyes de la hospitalidad Daireann.
Exilio
Conchobhair, el hijo de Daireann, se quedó atrás cuando los Sidhe huyeron a Arcadia. Cuando el resto de la Casa volvió, afirmaron que habían aprovechado la primera oportunidad para buscar a sus hermanos perdidos y reclamar las tierras y títulos por cuya protección se habían quedado atrás. Algunos dudan de la veracidad de esta afirmación y sugieren que, como otras, la Casa Daireann fue exiliada. Aunque nadie sabe si esto es cierto, los rumores insinúan que una prominente noble compartió un secreto que no tenía derecho a revelar, lo que da cierta credibilidad a esta historia.
Facciones y sociedades
El Cáliz de Belladona es una cábala de hábiles herbolarios y creadores de venenos que se reúnen cada estación para planificar y preparar cuidadosamente sus pociones. Los Compañeros del Garrote de Roble, un grupo de hadas unidas por juramento y diestras en armas ejemplifican las Tres Leyes de Conchobhair. Los Mayordomos de la Casa Caldero mantienen casas caldero, casas de postas que ofrecen hospitalidad a todos y que son la mejor encarnación de la costumbre de la hospitalidad de los Daireann.
Miembros destacados
Ard-Bantiarna Fiadnait ni Strachan, la Alta Señora de la Casa Daireann, que actúa como administradora. Eoghan ap Derrith, uno de los pocos miembros varones del Cáliz de Belladona. Iobhar y Sibeal, gemelos y miembros de los Compañeros del Garrote de Roble. Las hermanas Ó Donndubháin, que entre las cinco gestionan varias casa caldero.