H20 – Parte III Metatrama – Hombre Lobo

LA RECONSTRUCCIÓN

Los Túmulos constituían los cimientos de la vida espiritual de Gaia, y tras su destrucción, muchas antiguas fuentes de Gnosis comenzaron a secarse en el Reino Material. Los espíritus Celestiales ya no hablaban directamente a los Garou. Muchos creían que la Madre Gaia estaba muerta, y que ahora el mundo sólo existía como unas cenizas de su gloria anterior. Las tormentas continuaban devastando la Umbra, haciendo imposible que los Garou escaparan del Reino Material y encontraran una nueva Gaia.

Algunos Theurge afirmaban que Gaia sólo dormía, recuperándose del ataque y manifestando su fuerza para llegar de nuevo a sus hijos. Con su desesperación, los Celestiales e Incarna de las jerarquías espirituales incrementaron su presencia, esforzándose activamente con Garou y Fera para restablecer los pactos forjados en el amanecer de los tiempos. Los hombres lobo aprendieron y se diseminaron en el nuevo orden y realizaron el chiminaje necesario para mantener las nuevas relaciones.

Los Celestiales raramente hablaban directamente con los Garou, pero sus avatares eran mucho más habituales que antes, enviando visiones y otros espíritus servidores a la Umbra e incluso al Reino Material, para que cumplieran su voluntad. Nadie está seguro de lo que planean, pero por lo menos su renovada actividad da esperanza a quienes temían lo peor –el abandono total de los espíritus aliados de los que dependían los Garou y las Fera.

Sabine “Plata-Veloz” LaCroix, Reina de la Casa del Corazón Inquebrantable, elevó el grito pidiendo unidad y fuerza. Forjó el Santuario de Gaia: tradicionalistas y puristas que rechazaban los elementos de la Tejedora. Pedían un regreso a las viejas costumbres como una herramienta para fortalecer los corazones Garou contra el Harou mantener a la Nación en la dirección de Gaia. Los miembros del Santuario de Gaia se enfocaban en las viejas tradiciones que habían permitido la supervivencia hasta la Era del Apocalipsis. Creían que Gaia simplemente dormía para recuperar su fuerza, y que la fe y energía espiritual de los Garou le devolvería la voz.

Animaron a sus compañeros hombres lobo a recordar que el Harano era simplemente otro intento de debilitar la fuerza de Gaia, pues quienes sucumbían a la enfermedad espiritual ya no podían cumplir su propósito, sino que drenaban su energía en el momento en que Gaia más la necesitaba.

El nuevo Margrave, Josef Konietzko, vio la oportunidad para los Señores de la Sombra y la Nación Garou. Estaba claro que la Tejedora podía ser convencida para que ayudara a Gaia y canalizaba en propósitos positivos. La cooperación con los Fera había proporcionado resultados. Los Contemplaestrellas y los Hijos de Gaia convencieron a los Caminantes Silenciosos de que los llevaran a reunirse con los Mokolé para pedirles ayuda.

Los Mokolé prepararon un encuentro entre los Gurahl y los Hijos de Gaia. Juntos, fueron enviados a encontrar una antigua planta de los días de Pangea, que podría permitirles la creación de nuevo tipo de Túmulo. Cuando sus restos fosilizados fueron encontrados, trabajaron con los Uktena para devolverles la vida. Juntos, plantaron sus fragmentos en los corazones de los últimos grandes túmulos, y para alegría de todos, descubrieron las semillas de cristal.

Las semillas de cristal permitían la creación de un nuevo Túmulo, aunque más débil y menos poderosos que los antiguos, pero ese fragmento de Túmulo podía continuar manteniendo la fuerza vital del Reino Material y quizás con el tiempo podría terminar convertido en un gran Túmulo. El primero de los nuevos fragmentos de Túmulo fue utilizado para revitalizar el Clan de las Fuentes de los Prados en Las Vegas. Un destacado Theurge de los Moradores del Cristal, Lester Landmark, sacrificó su vida para sembrar la semilla de cristal y crear la primera esperanza de un nuevo Túmulo.

Sin embargo, la tensión estalló durante la ceremonia. Los Tótems de la ciudad no colaboraban unidos. Algunos eran espíritus del Kaos como el Viejo Hombre Río y Salamandra. Otros eran espíritus de la Tejedora como la Dama Fortuna y Neutrinos. Los Garou discutieron sobre qué espíritus debían aceptar. Algunos incluso se negaron a permitir que ningún espíritu de la Tejedora se uniera al Túmulo. Unos pocos incluso conspiraron para destruir a Neutrinos. Otros percibieron el poder de la Tejedora y vieron el beneficio de la cooperación. Sus debates reflejaron una gran discusión extendida por el conjunto la Nación Garou.

El Margrave empleó su influencia sobre la creación de las semillas de cristal para crear una nueva facción: el Concordato de las Estrellas, construido en torno a la tolerancia de las Fera y la cooperación con la Tejedora para proteger el Reino Material. Junto con sus tribus aliadas propuso que esta facción sería un movimiento de evolución y desarrollo de nuevas estrategias en la guerra contra el Wyrm, así como para la adaptación a un mundo cada vez más cambiante en el que los Garou se encontraban. Fue su visión, junto con la de Roger Daly, líder de los Moradores del Cristal, y otro, lo que convirtió al Concordato en una facción dedicada no sólo a adaptarse a los cambios, sino también a comprender cómo y por qué se producían, para que los Garou y las Fera ya no quedasen marginados por los avances de la humanidad. Soñaban con un mundo en el que los Garou fuesen líderes, impulsando a la humanidad en direcciones que permitieran ganar la guerra contra el Wyrm. Utilizando su poderosa presencia carismática el Margrave convirtió la alianza tribal en una poderosa organización política en el Concilio de las Tribus.

El conflicto continuó extendido en el Concilio, pues cada facción intentaba dirigir a la Nación Garou hacia sus propios fines. El nuevo acuerdo con las Fera requería que se les permitiera acceso a los Túmulos, o el proceso para generar nuevas semillas de cristal se detendría. Combinado con la llegada de la más reciente de las Plagas del Kaos, que provocó la condición conocida como el Mordisco, que permitía a los Parientes convertirse a la fuerza en cambiaformas plenas, los tumultos estallaron periódicamente en los salones de poder de los Garou y las Fera. Tanto el Concordato de las Estrellas como el Santuario de Gaia lucharon por codificar sus opiniones de la mejor manera para aceptar el Mordisco y los Garou que nacían de él. El peligro que representaba para los Parientes dispuestos a recibir el rito, así como la elevada posibilidad de fallo, hacía que la decisión de la Nación a la hora de afrontarlo fuese muy complicada y difícil.

NOTA DE LA HISTORIADORA: LAS PLAGAS DE LA NACIÓN GAROU

Existen bastantes evidencias que apoyan una teoría sin demostrar de que un enemigo desconocido desata de forma periódica una plaga claramente sobrenatural sobre la Nación Garou. Durante la Era de la Tragedia surgió una plaga de locura y engaño que infectó a los líderes de la Nación Garou, provocando que su toma de decisiones fuese errática y sospechosa. Durante la Era de la Ruina llegó la Plaga Despellejadora, una enfermedad física que mató a muchos Garou, Fera y sus Parientes, aunque sin dañar a la humanidad no sobrenatural. Durante la Era de la Tejedora surgió la Plaga de la Metamorfosis, una plaga del Kaos que parece que sólo afectó a las Furias Negras, incrementando el nacimiento de varones en la tribu.

También hubo otras plagas derrotadas por héroes desconocidos y olvidados.
La Era del Apocalipsis parece haber dado lugar a otro cambio extendido en los Garou que podría considerarse otra plaga del Kaos. El Mordisco, que permite a los Parientes convertirse en Garou o Fera, contiene aspectos de las plagas que hemos visto a lo largo de la historia, con un elevado índice de muerte entre quienes no consiguen sobrevivir a la transición ritual de la creación de un cambiaformas. Todavía está por descubrir si es la última u otra de las plagas que han afectado al conjunto del mundo. -Verity Argyris, Furia Negra, Historiadora

NOTA DE LA HISTORIADORA: APUNTE PERSONAL SOBRE LA EVOLUCIÓN DE LAS FURIAS NEGRAS

La Plaga Metamórfica que afectó a las Furias Negras durante la Era de la Tejedora dio lugar a una nueva generación de niños de ambos sexos en igual número en esta tribu. Mis madres estuvieron entre las primeras que cuidaron de los niños que habían nacido varones. Recuerdo el orgullo en sus caras durante mi Rito de Iniciación, cuando Pegaso miró en mi corazón y proclamó la verdad. Después de eso me abrazaron no sólo como su hija, sino como una hermana de la tribu. -Verity Argyris, Furia Negra, Historiadora

UN PRESENTE INCIERTO Y UN FUTURO DESCONOCIDO

El tema en los labios de todos los ancianos de la Nación Garou es el problema del trono vacante del Alto Rey. La Profecía del Fénix afirmaba que Albrecht sería el último rey antes del fin del Apocalipsis, pero desapareció en la batalla contra el Devorador de Tormentas. Sin embargo, dejó detrás la Corona de Plata en el Clan de la Luna Creciente. El Concilio de las Tribus ha afirmado que debería ungirse un nuevo Alto Rey hasta que Albrecht regrese. Sin embargo, el espíritu de Halcón que en el pasado activaba la Corona de Plata ya no está unido a ella. El Concilio ha decidido que quienquiera que termine siendo elegido para asumir esa posición primer debe probarse a sí mismo y encontrar una manera de convencer otra vez a Halcón de que dé su poder a este símbolo definitivo de liderazgo. Sólo entonces podrá coronarse un nuevo Alto Rey o Reina.

Actualmente los aspirantes más fuertes son el Margrave Josef Konietzko y la Reina Sabine “Plata Veloz” LaCroix. Su apoyo está dividido entre facciones, y los Caminantes Silenciosos se niegan a apoyar a ninguno debido a la advertencia de la profecía de Simeon Abd al-Hakim.
El amanecer de la Era del Apocalipsis ha reducido la animosidad entre Fera y Garou, pero todavía quedan muchos temores y suspicacias. El Concilio de las Tribus, con gran reticencia, aceptó que los últimos trece Túmulos, bajo el control de la Nación Garou, deberían abrirse a las Fera que participaron en su defensa. A las Fera también se les ha permitido unirse a cualquier Clan de la Nación Garou que las acepte. Los Bastet y los Garou controlan unidos el Túmulo del Corazón Hueco en Brasil, que sirve como bastión en las relaciones entre ambas Razas Cambiantes.

El Ahadi ha demostrado que la cooperación es necesaria para la supervivencia, pues sus miembros lucharon unidos para derrotar a Diente Negro y después defendieron sus tierras contra las plagas de vampiros y tormentas umbrales. Egipto, Argelia y Liba siempre han sido refugio de los no muerto, pero ahora, con la expansión de los conflictos y la guerra, el continente africano es vulnerable, y vampiros salvajes se han instalado en Níger, Chad e incluso en Sudán.

“Resistir” es la nueva clave de la Era del Apocalipsis. Las tribus de la Nación Garou han cambiado y evolucionado para hacerlo –resistir en un tiempo en el que cada nuevo día trae un nuevo cambio y acaba con cualquier esperanza de un mañana mejor y se lleva un poco de quienes viven. Por lo que parece, el Apocalipsis no es una última batalla, ni el fin del mundo, sino una larga guerra de décadas por el alma de la Tierra.

Mientras la Nación Garou intenta reconstruirse, la amenaza siempre presente del Wyrm evoluciona en formas nuevas y siniestras, esforzándose todavía por provocar el fin de este Reino y reclamar la victoria total. Antiguas bestias peligrosas surgen de los océanos, despertadas por el cambio climático. Criaturas corruptas y Perdiciones insidiosas azotan el mundo y tratan de reemplazar a Gaia con el Wyrm como el espíritu dominante. Aunque no están directamente corrompidos por el Wyrm, los vampiros continúan extendiéndose y fomentando la destrucción de las Tierras del Kaos. La Celosía ha cambiado, y las Tierras Rotas y los Túneles del Wyrm aparecen cerca de los framentos de Túmulo, atraídos por estas vulnerables fuentes de poder.

El cambio climático representa la mayor amenaza para el mundo, provocando que se derritan los casquetes de hielo polar, el incremento de la temperatura del mar en todo el mundo, lluvia ácida y la expansión de una polución horrible que ahoga la vida del ecosistema. Los Garou llaman a esto la Epidemia –el último mecanismo de defensa de Gaia, una fiebre que quema la vida humana para el mundo pueda recuperarse. Especies completas están desapareciendo a un ritmo vertiginoso, y muchos científicos creen que pronto se producirá una gran extinción. Los desastres ecológicos no han dejado de incrementarse desde la década de 1970. Durante la pasada década se han incrementado los tornados, inundaciones, huracanes y tsunamis, y algunos Garou si pregunta sin son señales de que Gaia intenta contraatacar el avance destructivo de la humanidad. Algunos humanos han comenzado a cambiar su conducta hacia el mundo, pero los siglos de abusos han dejado su marca en el ambiente, y podría ser demasiado tarde para salvar este mundo.

Los ecoterroristas a menudo se han aliado con la causa de la Nación Garou, tratando de proteger la Tierra antes de que sea demasiado tarde. A medida que sus tácticas se hacen más violentas y sus visiones más radicales, está claro que estos humanos se están convirtiendo en un problema en sí. Se sabe que el Wyrm influye a estos individuos, y su presencia entre ellos se ha extendido en los últimos años. Las protestas pacíficas se convierten en disturbios, y vidas inocentes se pierden en medio del fuego del odio y el miedo.

Pero todavía hay esperanza. El Ahadi ha estado enviado ayuda desde África para proteger Túmulos. Se han forjado y templado nuevas alianzas en los fuegos de la batalla. Los fragmentos de Túmulo puede que revivan el espíritu de Gaia. Legiones de Garou han comenzado un sabotaje global y coordinado de la irresponsabilidad de la humanidad, atacando a los peores contaminadores mediante tácticas de guerra y ataques estratégicos. Unos pocos susurran que puede ser el comienzo de un nuevo Impergium, dirigido a reducir la población del mundo a cifras sostenibles, reforzando la idea de que el verdadero enemigo es la humanidad. Otros creen que esta reducción de las filas de la humanidad es una simple táctica temporal para limitar los excesos del mundo hasta que los humanos aprendan a contenerse.

Si este mundo es imposible de salvar, no será porque el coraje de la Nación Garou flaqueó. La Era del Apocalipsis es una época para forjar nuevos héroes y leyendas para sembrar la siguiente era. Están preparados para derramar su sangre por su Madre Gaia y por todo lo que se ha perdido. ¿Te unirás a ellos? ¿Cuándo desatarás tu Rabia?

CONTINUARA…

Tiburk

Un amante de los juegos de rol...

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