Ningún Vástago, ni siquiera los Sabbat con quienes estos Descastados se alinean, conocen el verdadero origen de los Kiasyd. Son reservados hasta la timidez y es altamente improbable que dejen a nadie conocer nada sobre su árbol de familia. A los Escarlatas (el alias los equipara a los catedráticos de Oxford y Cambridge, que favorecen las capas rojas del oficio) no les gusta realmente socializar, pero reconocen la importancia de permanecer al tanto de los cambios de los tiempos. Buscan libros y manuscritos raros, tomos antiguos y la ficción más novedosa; cualquier cosa que estimule su imaginación y sacie su apetito de iluminación.
Alias: Escarlatas.
Apariencia: Los Kiasyd tienen complexiones luminosamente pálidas, con la textura del alabastro inmaculado. Bajo la luz de la luna brillan con un aura azul hielo, por el resto del ocaso, tras alimentarse; procuran que otros Vástagos no vean esto. Son altos, a veces llegando a los siete pies y medio, aunque de seis pies seis pies y medio es una medida más común. Los ojos son completamente negros, sin siquiera un atisbo de blanco en ellos; generalmente esconden estas inquietantes características tras gafas de sol fuertemente tintadas y suelen apreciar las novedades mortales en anteojos de este tipo. La mayoría de los Kiasyd visten al estilo de la alta burguesía, sin deslumbrar o preocuparse por la moda, pero con la mejor manufactura que puedan permitirse.
Refugios: Los Kiasyd anidan en cualquier lugar apartado que dé cabida a sus vastas colecciones de ingentes chucherías, libros y pergaminos. A algunos Kiasyd les gusta asentarse en los huecos más recónditos de librerías y colegios (pero solo a los más valientes de entre ellos) arriesgándose a visitas inesperadas. Los Kiasyd encuentran de poco gusto hacer sus refugios unos cerca de otros. Dado que ganan prestigio en su línea de sangre mediante el mero tamaño de su artística recolección de libros y cosas, no habrá dos Kiasyd que erijan voluntariamente sus refugios en la misma zona. Dos o más pueden compartir la misma ciudad, si dicha ciudad tiene distritos obviamente separados, pero esta es la extensión de la tolerancia de los Kiasyd hacia cualquiera de los suyos que usurpe sus celosamente guardados territorios.
Trasfondo: Los sires Kiasyd escogen a mortales inteligentes e introspectivos, independientemente de su clase. El miembro autodidacta de la clase trabajadora es un neonato tan deseable como un profesor altamente cultivado y educado. Académicos, bibliotecarios, profesores, procuradores de museo y teóricos solitarios de las matemáticas, la historia y la arqueología son excelentes opciones para el trasfondo mortal de un Kiasyd.
Creación del personaje: Los Atributos Mentales son primarios, como lo son los Conocimientos o las Técnicas. Mentor, Recursos y Generación son Trasfondos lógicos, y los Kiasyd cultivan muy pocos Contactos, incluyendo a raros tratantes de libros, ancianos procuradores, agentes de subasta, arqueólogos y otros buscadores de tomos raros y bagatelas. Los Aliados son raros, dado que los Kiasyd se mantienen demasiado solitarios como para tener «amigos» al nivel de sus chiquillos o de sus ghouls especializados. Futurista y Conservador son las Naturalezas y Conductas más comunes.
Disciplinas: Dominación, Mytherceria y Obtenebración.
Debilidades: El hierro frío es la debilidad de la Línea de Sangre. El hierro frío hierro es puro, sin templar por ningún proceso de manufactura de la Era Industrial. No incluye aleaciones del hierro como el acero Damasco. El proceso Bessemer de conversión de la mena de hierro en acero ha hecho las noches victorianas más sencillas para la línea de sangre, si no del todo confortables, dado que muchos transportes de la época usan aún derivados del metal. Cuanto más alto el contenido de hierro puro, más difícil es para los Kiasyd controlar su aversión. Los Kiasyd sufren un +1 de penalización a la dificultad a sus intentos de resistir el frenesí, cuando hay hierro frío a menos de una yarda de ellos por cada punto de Resistencia que el personaje tiene. Tocas hierro frío provoca una tirada automática de frenesí, con el +1 a la dificultad aplicado.
Organización: La mayoría de los Kiasyd respetan los ritos del Sabbat como los anglicanos de poca gracia y piedad real hacen con las iglesias a las que asisten tan solo en Yuletide, High Mass o Easter. Los Kiasyd atienden al Esbat, participan en la Vaulderie (generalmente limpiando el borde del cáliz con un pañuelo de bolsillo antes de beber de él) y se preparan para partir al final del servicio. Un Escarlata en un grupo puede compartir una o dos historias enigmáticas pero no permanecerá en estas reuniones por mucho tiempo. Cada cincuenta años, todos los Kiasyd disponibles se encuentran normalmente en el Gran Simposium. Las invitaciones se envían cinco años antes del evento, para dar a los invitados suficiente tiempo de respuesta. Ausentarse de estos eventos es una marca de pérdida de favor y un desprecio abyecto para con el anfitrión electo. Solo las más sinceras y terribles excusas absolverán al transgresor del pecado de la inasistencia. Los participantes votan títulos de honor por voto secreto; todos ansían, sin dar muestras de ello, estos honores que incluyen derechos de acceso a las colecciones de otros y para mayor honor de todos, el privilegio de ser el anfitrión del próximo Gran Simposium.
Prestigió en la línea de sangre: Los Kiasyd ganan prestigio por lo vastos y completos que sean sus archivos. No es inusual para aquellos asistiendo al Gran Simposium que lleven consigo largos inventarios de sus pertenencias, que podrían comparar y así regodearse tímidamente o lamentarse reservadamente de sus éxitos y derrotas.
Comentario: (acariciando reverentemente la encuadernación de piel de una copia de la primera edición de Alicia a través del espejo de Lewis Carrol): «¿Ves estas ilustraciones? Tenniel en sus comienzos. Y podemos aprender algo de alguien que se adentra en los reinos de su imaginación buscando el conocimiento y se encuentra sí mismo como el elemento extranjero en un mundo poco familiar. Huye, ten cuidado de ello».
Estereotipos
Camarilla: Lo uso cuando debo y los ignoro en el resto de los casos. – El Honorable Roderick Phillips March, Collectio Emeritus, Genus Vampiricus, Species Kiasydum, Stoke-upon-Kent.
Sabbat: La bestia es una herramienta útil, ¿pero es tal inaguantable falta de civilización necesaria? Como individuos, son advenedizos y sus manadas son poco más que meras reuniones de plebe. – Roderick Phillips March.
La visión desde el Exterior:
La Camarilla: ¡Hey! ¿Quién es ese tipo? No, ese no. ¡Aquel! El tipo que sale de la impactante tienda de Ladyship Felicity. ¿Es la luna, o ese tipo es un poco azul? ¿Y por qué narices lleva ese libro sangriento? No sabía que esos individuos venían al mercado a hacer florecer su gusto por la lectura. – Peter Clearly, Machaca Brujah que hila fino, Bristol.
El Sabbat: En pocas palabras, los caballeros saben demasiado. Creo que ignorarlos podría revelarse como un error de juicio fatal. – Inachus Christos Baptiste, Monseñor Lasombra, Atenas
