El Ensueño es un lugar de maravilla quimérica y cada parte de él surge de las imaginaciones y sueños de la humanidad a lo largo de miles de años. No importa dónde se encuentre un changeling en el Ensueño, puede estar seguro de que hasta la más pequeña piedra o la más imponente montaña proviene de la mente de un Soñador. “Quimera” es un término genérico que los changelings usan para describir todo dentro del Ensueño o de un reino onírico, desde las nubes del cielo (y el propio cielo) a los árboles y las rocas, pasando por los conejos y los galimatazos que retozan en el campo. Digamos que la quimera es el componente clave de todas las partes conocidas del Ensueño y es como decir que el carbono es un componente clave de toda la vida conocida en la Tierra.
Lo que compone exactamente la quimera es un enigma. Aunque muchas hadas han estudiado la materia onírica, todas sus propiedades, salvo las más básicas, escapan toda definición. De hecho, los changelings ni siquiera pueden estar seguros de que la quimera sea real: Aunque las hadas y los Encantados pueden observar quimera con sus cinco sentidos, ésta no puede afectar al mundo mundano salvo bajo circunstancias especiales.
La materia onírica que compone la forma de una quimera está en alguna parte entre el Glamour y la Banalidad. Es burda aunque elegante, capaz de retener una forma al tiempo que es maleable, y puede cambiar sus propiedades para imitar carne, hierba, hojas, pelaje, aliento, roca, agua, suelo, hielo, fuego, escamas de dragón o cualquier cosa que alguien pueda soñar.
La quimera puede categorizarse ampliamente en función de si es accidental o soñada, si es animada o inanimada y si es consciente o no. El Ensueño no ofrece normas estrictas sobre cuáles de estas amplias categorías pueden existir: un árbol podría ser sólo un árbol (accidental, no consciente e inanimado), pero también podría ser un ent (soñado, consciente y animado).
Accidental frente a soñada
El Ensueño es un lugar en constante cambio. De lejos, la mayoría de objetos y seres quiméricos son efímeros y pasajeros, soñados para existir durante unos pocos segundos antes de evaporarse como el humo. Esta clase de quimera se conoce como quimera accidental y es el tipo que más comúnmente se encuentra en el mundo físico, creada de fantaseos diurnos y pensamientos ociosos. Los mortales no pueden verlas, ya que sucumben rápidamente ante los estragos de la Banalidad, especialmente si son separadas de la zona en la que cobraron vida.
En cambio, la quimera soñada surge de las mentes de changelings y mortales y es el tipo de quimera más común en el Ensueño. La quimera soñada es más dura que la accidental y es capaz de sobrevivir de forma indefinida después de que la ensoñación que la creó termine.
Inanimada frente a animada
La quimera inanimada son los bloques de construcción del Ensueño y puede ser tan sencilla como una piedra o tan compleja como seda de araña. Son los sueños de ropa, metales y preciosas joyas que surgen de las ensoñaciones de individuos o de los sueños colectivos de la humanidad. También puede ser el producto secundario de criaturas quiméricas: las arañas quiméricas producen seda, la cual puede recolectarse y usarse como materia prima.
La quimera inanimada puede manifestarse semiformada y maleable o como objetos de arte totalmente realizados. Virtualmente, cada pieza de belleza o importancia en el Mundo de Otoño tiene una contrapartida quimérica (en el París del Reino de Neustria, la catedral de Notre Dame se alza alta e imponente; más al sur, en el Ensueño del Imperio Heleno, la Acrópolis resplandece nueva y completa bajo la luz del Sol mediterráneo).
Aun así, no toda la quimera inanimada totalmente realizada es duradera. Habitualmente, sólo los lugares de gran creatividad o los que representan los sueños y esperanzas de la gente mantienen su reflejo en el Ensueño. Una pastelería puede tener un reflejo en el Ensueño, pero es basto y está en un estado de flujo, cambiando con cada nuevo cliente que cruza la puerta.
En cambio, la quimera animada casi siempre se crea totalmente formada. Puede que no sean necesariamente conscientes, pero es difícil diferenciar las quimeras animadas no conscientes de las verdaderamente conscientes. Como la quimera inanimada, la animada puede cosecharse para obtener Glamour o materias primas de trabajo.
No consciente frente a consciente
La quimera no consciente puede parecer ser inteligente y estar viva, pero incluso quien plantea los más astutos acertijos o el cazador más capaz es poco más que una serie de instintos predispuestos y comportamiento preprogramado.
La quimera consciente puede no ser animada, pero por lo demás está viva en todos los sentidos de la palabra. Posee consciencia de sí misma, inteligencia y libre albedrío y es capaz de autodeterminarse.
