Tras la muerte de Wallace, Robert Bruce, un descendiente de David I, asumió el liderazgo del movimiento de resistencia. En marzo de 1306 fue coronado como Roberto I, rey de Escocia, y comenzó una campaña de guerrilla sistemática contra los destacamentos ingleses y la nobleza escocesa que los apoyaba.
Finalmente, Eduardo II dirigió una expedición de castigo en la primavera de 1314; en la batalla de Bannockburn los ejércitos escoceses infligieron a esta fuerza de invasión una de las más desastrosas derrotas de los anales militares ingleses. En 1326 el pueblo llano de Escocia se aseguró por primera vez la representación en el Parlamento escocés. La guerra contra Inglaterra finalizó con la victoria en 1328, cuando los regentes del joven Eduardo III de Inglaterra aprobaron el Tratado de Northampton, que reconocía a Escocia como reino independiente, una independencia que mantuvo durante casi 400 años.
Roberto I Bruce (1274-1329), libertador de Escocia y rey de este país con el nombre de Roberto I (1306-1329). Su nombre original era Roberto Bruce y para distinguirle de su padre y de su abuelo, que tenían el mismo nombre, en ocasiones es denominado Roberto Bruce VIII. Como conde de Carrick, prestó homenaje al rey Eduardo I de Inglaterra, quien, en 1296, derrotó al rey Juan de Baliol y, por lo tanto, rehusó reconocer a otro rey de Escocia. Bruce posteriormente abandonó la causa de Eduardo y se unió a otros líderes escoceses para levantarse en armas por la independencia de su país. En 1299, el año siguiente a que el patriota escocés sir William Wallace fuera derrotado por Eduardo en Falkirk, Bruce, que todavía gozaba del favor de Eduardo, fue nombrado uno de los cuatro regentes que por aquel entonces gobernaban el reino en el nombre de Baliol. En 1305 fue uno de los consultados sobre la decisión de convertir Escocia en una provincia de Inglaterra. En 1306 se encontró con un viejo enemigo, el patriota escocés John Comyn, que era el sobrino de Baliol; estalló una disputa entre ambos y Bruce apuñaló a Comyn. Bruce proclamó su derecho al trono, y el día 27 de marzo de 1306, fue coronado rey en Scone.
Bruce fue depuesto no obstante en 1307 por el ejército de Eduardo I, y fue forzado a refugiarse en las tierras altas y más tarde en la pequeña isla de Rathlin, en la costa de Antrim (en el norte de Irlanda actual). En su ausencia todas sus propiedades fueron confiscadas y él y sus partidarios fueron excomulgados. Sin embargo, continuó reclutando seguidores y en menos de dos años arrebató casi la totalidad de Escocia a los ingleses, a quienes derrotó de nuevo en 1314 en la batalla de Bannockburn; también invadió dos veces Inglaterra y en 1323 firmó con Eduardo II una tregua de trece años. Tras la subida al trono de Eduardo III en 1327, estalló la guerra una vez más y los escoceses triunfaron de nuevo. En 1328, ambos monarcas establecieron un tratado que reconocía la independencia de Escocia y la legitimidad de Bruce al trono.
En sus últimos años, Bruce fue atacado por la lepra y vivió recluido en el castillo de Cardross, en la ribera meridional del estuario del Clyde, donde murió. Le sucedió su hijo, David II. El sobrino de Bruce, Roberto II, que sucedió a David, fue el primer rey de la Casa real inglesa y escocesa de los Estuardo.