¿Qué siente un Garou cuando utiliza su potente olfato? ¿Como siente un Garou el mundo que lo rodea?
Los Garou no son lobos ni humanos sino el fruto dé ambos, criaturas de salvajismo y civilización. Viven en el mundo material y en el espiritual, se sienten como en casa en ambos, aunque están extrañamente desconectados de ellos. La mayoría emplea sus vidas buscando su significado mediante la infinidad de batallas a las que les lleva su naturaleza. En muchos aspectos, la percepción es la realidad, por lo que para entender a los hombres lobo debemos conocer sus sensaciones. Concentrándose en las diferentes maneras en las que los hombres lobo se mantienen conscientes del mundo que les rodea, el Narrador puede añadir profundidad a la descripción de una escena y dar así una mayor sensación de realidad a su crónica y a sus historias.
Todo aquello que percibimos proviene de nuestros sentidos. La mayoría de la gente se centra en la vista y posee una manera visual de pensar. Durante la interpretación, pueden «ver» los eventos en el ojo de su mente. Más raramente, un individuo puede confiar en su oído, recordando las palabras y prestando atención a la experiencia, capaz de repetir partes de la sesión mientras que la persona orientada visualmente puede describir cosas que no fueron descritas por el Narrador. Un pequeño porcentaje de la gente se centra en uno de los otros sentidos para su percepción primaria. Por esta razón, muchos Narradores se olvidan de usar los otros sentidos en sus ambientaciones. El sentido del olfato posee un disparador de memoria más fuerte que cualquier otro de nuestros sentidos. El tacto puede cambiar nuestra química corporal inmediatamente. La percepción se convierte en la realidad.
Los lobos no confían en su vista sino en el olfato como su sentido principal. Los lobos no son perros salvajes; tienen habilidades que sus primos domesticados perdieron hace milenios. Un lobo posee un sentido del olfato mucho más potente que el de un perro. Si un lobo olfatea un olor, no sólo sabe que es el de un humano sino que también qué fue lo último que comió la persona. También puede recordarlo y rastrearlo durante horas. De cierta forma, el sentido del olfato de un lobo funciona como una poscognición. Con un olorcillo, el lobo aprende lo suficiente como para saber eventos que han tenido lugar horas antes.
Los hombres lobo poseen poderosos sentidos. Constantemente comprueban su entorno, atentos a cualquier problema. Sus instintos, enterrados en la profundidad de sus subconscientes, les ayudan a darse cuenta de los peligros. En una ambientación urbana, el constante retumbar de los ruidos y sensaciones puede volver a algunos, y en especial a los lupus, locos por el ruido, las visiones, y los olores. Lo contrario también es cierto: muchos Moradores del Cristal sienten que los pacíficos y extraños olores de la naturaleza inquietantes. Algunos Garou amortiguan sus sentidos, decidiendo ignorar el mundo que les rodea. A menudo, estos son chicos perdidos, muchos de los cuales tienen dificultades caminando de lado hacia el mundo espiritual.
Incluso cuando los hombres lobos están en forma homínida, sus sentidos son más agudos que los de una persona normal. Los Garou prestan más atención a sus sensaciones de lo que hacen los humanos. Un hombre lobo no escucha mejor, pero lo hace con más atención. Sus instintos de depredador guían sus ojos a notar cosas fuera de lo normal. Degusta cuidadosamente sus alimentos, saboreándolos y prestando atención a los sabores, en lugar de engullir la comida. Los olores del mundo tienen significado para él, y puede interpretarlos inconscientemente en lugar de ignorar los aromas del mundo moderno. Un Garou ansía tocar, sintiendo la brisa en su piel, detectando los sutiles cambios en la temperatura y permaneciendo alerta de la ropa a su espalda.
Los sentidos cambian junto con las formas. La forma Glabro aumenta el olor hasta cierto punto. Los instintos salen a colación más fácilmente, en general como erizamientos en la nuca o sensaciones extrañas en el estómago. Algunas veces estas sensaciones instintivas son positivas, siendo verdad. Varios hombres lobo creen que pueden discernir a la Parentela del resto de la humanidad echándoles un vistazo u oliéndoles. En forma Glabro, el sentido del tacto aumenta: la carne se vuelve inmediatamente fresca o rancia; a los líquidos les sucede algo parecido; la visión nocturna mejora, aunque algunos creen que tienen problemas a la hora de ver ciertos colores en Glabro.
La forma Crinos puede tener la mezcla más aguda de sentidos que se pueda, pero la habilidad de un hombre lobo para interpretar esas sensaciones se puede convertir en un gran problema. La Rabia siempre arde en el corazón de un Garou en forma Crinos. Los instintos que ayudan a un hombre lobo a permanecer sintonizado con su entorno repentinamente demandan la caza, saborear la sangre caliente y el sonido de los huesos partiéndose. Violentos deseos de poner a prueba la fuerza de sus huesos y músculos contra su presa rápidamente saturan todos los sentidos. Cualquier movimiento inusual atrae la atención del Crinos. La oscuridad no es un obstáculo, aunque un Crinos todavía disfruta de los vívidos colores de su herencia humana. Los oj9s ven cosas a distancias mayores que los humanos o los lobos. El oído de un Crinos se agudiza y determina la dirección de los sonidos más tenues. Los sonidos altos por encima del rango humano, como el zumbido de los electrodomésticos, los silbatos para perros e incluso las campanas distantes, llegan al oído del hombre lobo. Un Garou se vuelve más consciente de las vibraciones, sintiendo hasta los retumbas más profundos del mundo. Al igual que muchos animales, un hombre lobo puede sentir desastres naturales, como los terremotos, antes de que ocurran. El olfato es tan poderoso como la vista para un hombre lobo en forma Crinos: un enemigo no tiene por qué ser visto o escuchado para que note su presencia. El tacto aumenta, aunque sensaciones como el dolor se reducen. Un hombre lobo siente cada brizna de aire a través de su pelaje. ¡Cuántas garras y espadas son esquivadas porque el Crinos las siente antes de que le impacten?
Pero la constante subida de adrenalina, el rugido de la sangre en sus oídos y la palpitación de la rabia dentro de su corazón hacen que las percepciones se emborronen. Algunas veces todo se vuelve una amenaza y el control es una constante en la batalla. Un tono de voz agresivo se convierte en una amenaza directa. Los movimientos repentinos son ataques por sorpresa. Un Garou puede saborear la piel de su oponente antes del primer mordisco. Aunque la rabia varía según el individuo, todo hombre lobo en Crinos se acerca más al precipicio.
La forma Hispo lleva a un hombre lobo mucho más cerca de su herencia lupina. El lobo terrible puede ver mucho más lejos que los humanos y conserva la habilidad para distinguir los colores. Un Hispo posee una excelente visión nocturna haciéndole capaz de detectar incluso el movimiento más sutil en condiciones cercanas a la oscuridad. Pero los hombres lobo que se sienten a gusto en forma Hispo no suelen confiar en la vista, sino en el olfato y el oído.
Un hombre lobo en Hispo puede detectar incluso los sonidos más débiles a gran distancia. Puede filtrar hasta los sonidos más débiles y determinar rápidamente su dirección y origen. Ciertos sonidos alcanzan aliaba desde kilómetros de distancia. Los aullidos despertarán a un Hispo incluso si son inaudibles para el oído humano.
Muy poco pasa desapercibido a sus oídos, y todavía menos a su olfato. En la forma del lobo terrible, puede parecer que un hombre lobo posee una consciencia casi espacial. Su sentido del olfato le permite permanecer consciente de todo lo que sucede a su alrededot Los cambios en el viento tienen cierto efecto sobre su sentido, pero sorprender a un hombre lobo sigue siendo muy difícil. Es más, puede reconocer olores y encontrar rastros que pueden tener varios días. Un Garou no necesita haber visto al humano que ha pasado cerca de su túmulo para identificado semanas después. El olor funciona tan bien como si hubiera visto al individuo. Muchos hombres lobo están especialmente atentos al olor de la sangre y los sonidos de violencia.
En forma Lupus, el sentido del olfato es el que gobierna. Aunque ya se ha comentado anteriormente, un hombre lobo puede recomponer escenas del pasado mediante su olfato. Por ejemplo, en un túmulo podría reconocer qué miembros de su clan han estado presentes y quiénes no, aunque la habilidad del lobo para oler no es infalible. Los sucesos naturales, como tormentas y nevadas, pueden eliminar o enterrar olores. Los olores fuertes, desde productos químicos tóxicos hasta el almizcle de los animales, puede enmascarar otros. Los cazadores suelen usar botes para ocultar sus olores. En la naturaleza, las mofetas pueden ser un problema, aunque se sabe de Ragabash que les han presentado a los nuevos cachorros homínidos para divertirse. Esta forma posee un excelente oído: pueden ver bien en la noche, pero los Garou en Lupus suelen tener problemas a la hora de diferenciar colores. Al contrario que los auténticos lobos, la mayoría de los Garou pueden ver en color en todas sus formas, aunque los Narradores podrían decidir cambiado en sus crónicas si creen que así serán más entretenidas en sus partidas.
Los hombres Lobo también poseen otros sentidos. La Umbra afecta a los hombres lobo de varias formas. Incluso sin «echar un vistazo”, un Garou puede sentir cambios en el mundo espiritual. Los miembros de una manada pueden decir cuándo han entrado en un laboratorio aséptico antes de que hayan percibido el olor a aire muerto, Por otro lado, cuando un espíritu pasa a través de un hombre lobo, siente algo, ya calidez o fuerza si es amigable, o frío y muerte si es un enemigo potencial. Estos sentidos son auténticos y poderosos. Los hombres lobo con mucha Gnosis pueden experimentar el mundo espiritual incluso con más intensidad.
Los Garou también poseen poderosos recuerdos raciales. Algunos hombres lobo experimentan directamente las memorias de sus ancestros, incluso aquellos que no suelen tener fuertes sensaciones de déja vu. Muchas veces un Garou ha huido a través de la naturaleza que nunca ha visitado antes, y de alguna manera se las ha arreglado para eludir a sus perseguidores y evitar obstáculos de manera instintiva. Otras veces, los hombres lobo han reconocido de forma natural detalles de ciertos objetos y sucesos del pasado. Estas experiencias suelen ocurrirles a las formas- Lupus, Hispo y Crinos, aunque no se limitan sólo a ellas.
Las manadas, poderosas pueden desarrollar un vínculo que les une a todos. Los miembros de algunas manadas que llevan mucho tiempo juntas pueden prácticamente leer los pensamientos de los, demás. Los compañeros de manada tienen dificultades a la hora de ocultar sus emociones a los otros miembros. Si algo va mal, toda la manada lo sabrá. Pueden no saber los detalles, pero sabrán que algo ocurre. Algunas manadas incluso perciben cuándo uno de sus miembros está en peligro. Existen muchas historias de cómo un miembro de la manada que está \’solo es atacado y los demás miembros sienten su dolor o una gran sensación de urgencia. Algunas veces, otros miembros pueden sentir la necesidad de ir a cierto lugar; incluso si nunca han estado allí, para ayudar a un compañero de manada. Los Theurge discuten si este \»sentido de manada\» es un auténtico sentido común a todos los hombres lobo, o si en su lugar es una función del espíritu totémico de la manada. Sea como fuere, las que permanecen juntas parecen desarrollar este fuerte lazo, incluso entre miembros que se odian. Un Narrador puede usar este sentido de manada para ayudar a mantener a los jugadores juntos, haciendo que se den cuenta de que su unión es más que un simple acuerdo verbal.
Muchos espíritus enseñan Dones que emplean los sentidos. Por ejemplo, Sentir el Wyrm funciona de forma diferente para cada hombre lobo. Un lupus puede detectar un hediondo rastro de corrupción y descomposición procedente de un fomori. Un homínido puede ver un resplandor oscuro rodeando a una criatura manchada por el Wyrm. Otras posibilidades incluyen tener un sentimiento de intranquilidad cuando un Garou piensa sobre el objetivo. Las sensaciones pueden cambiar con las formas, añadiendo variedad al uso de los Dones sensoriales y dando a los jugadores una mayor sensación de diferencias entre formas.
Sentidos Aguzados requiere una mención especial. Los Narradores podrían querer usar este Don a la hora de sentir a los miembros de manada o conocer cuándo su túmulo puede estar en peligro. Mientras que el Garou «normal» puede tener percepciones más agudas que los humanos y los lobos, con este Don debería tener la posibilidad de realizar algunas proezas extraordinarias (aunque recuerda que sólo es un Don de Nivel Uno y que no debería empañar Dones más poderosos).
Aunque los sentidos de un hombre lobo son sus aliados, también pueden volverse en su contra. Los cazadores experimentados usan poderosas sirenas de alta frecuencia contra los Garou en forma Hispo o Lupus. Los resplandores brillantes repentinos pueden cegar a un hombre lobo e incluso hacer que pierda el control. El gas lacrimógeno no es tan efectivo sobre los Garou como sobre los humanos (gracias a sus capacidades curativas), pero siguen siendo un problema. Indirectamente, la distracción de darse cuenta de que un compañero de manada está sufriendo o sentir una fría presencia en la Umbra, pueden condenar una lucha. La simple cacofonía de olores y sonidos en una planta industrial puede hacer difícil que un hombre lobo se concentre.
Usar los sentidos de un hombre lobo da al Narrador un arsenal de descripciones con las que ayudar a dar vida una escena. Muchos de estos agudos sentidos pueden dar pie a escenas e historias, y permitir al Narrador retomar el control de una escena que se le haya ido de las manos. ¿Se ha ido por su cuenta uno de los personajes y ha hecho algo estúpido que puede arruinar la partida de esa tarde? Haz que el resto de la manada haga su aparición simplemente porque han sentido que «tenían que estar álli». ¿Se han quedado parados los jugadores y sus personajes en un misterio que ha ido de la intriga a la frustración? Usa el olfato de un lobo para darles más pistas. Puede que un encuentro casual haga que un hombre lobo reconozca un extraño olor que no te preocupe permitir que los cazadores tomen ventaja de los sentidos: si tu manada se ríe de una banda de humanos a tos que han desmembrado antes de que los cazadores puedan respirar dos veces, ralentízalos con destellos o sonidos fuertes. Sobre todo recuerda que los hombres lobo tienen poderosos sentidos y que como Narrador todos estos proveen oportunidades para que animen tus partidas, y den forma a tus escenas.