La Reina Ginebra
Era la hija del rey Leodegrance que gobernaba las tierras de Cameliard. El rey Arturo envió a Lancelot a que la trajera a Camelot (ciudad que más tarde se llamaría Winchester) para casarse con ella, y en este primer viaje juntos ambos se enamoraron. En cuanto llegaron a Camelot Arturo y Ginebra se casaron, y Ginebra se convirtió en el centro de la corte. Tuvo en general buenas relaciones con su esposo. Pero con Morgana se enemistó porque Ginebra expulsó de la corte a Lamorac, que era el amante de Morgana. Morgana guardará siempre rencor hacia la reina y se lo transmitirá a sus hijos. El amor que Lanzarote y Ginebra sintieron duraría hasta la muerte de ambos. Este amor fuera del matrimonio es muy comprensible para un lector de la Edad Media. Es propio de una época en la que los matrimonios se celebraban en muchas ocasiones por motivos…