Federico DiPauda, La Mano Derecha de la Camarilla
Siendo al mismo tiempo aristócratas corruptos y justos pastores de los depredadores, los miembros de esta secta se acercan más y más al borde del abismo cada noche. Aunque aprieta los puños cada vez con más fuerza, los vampiros se escapan de ella como granos de arena. Trasfondo: Federico le contesta a cualquiera que pregunta que su vida ha sido semejante a la de cualquiera. Desde las alturas de la gloria y la esperanza a las o profundidades del dolor y el terror, se ha aferrado a sus creencias y aspiraciones a pesar de los caprichos del destino. Ahora a veces se hace referencia a él como “La Mano Derecha de la Camarilla” porque sus siglos de servicio en el papel de Arconte no tiene parangón y están más allá de todo reproche(¿Qué otro Cainitas, al menos uno que opere en los planes de otros, ha conseguido mantener esa posición…