Los Pisanob
A principios del siglo XVI, Hernán Cortés llevó a una pandilla de españoles al “Nuevo Mundo” para exterminar indígenas y robarles su mierda: Unos pocos de los nuestros se apuntaron al viaje (ya sabes, para seguir compitiendo) y se encontraron con los Pisanob entre los paganos. Los aztecas, a los que “descubrió” Cortés, tenían unas ceremonias religiosas que incluían un verdadero pringue de sacrificios humanos. Los Pisanob eran un grupo estrechamente unido de clérigos que conducían y regulaban estas funciones. Supervisaban las ceremonias, con frecuencia matando ellos mismos a las víctimas, y le decían a la gente que eran sacrificios hechos a los dioses. Lo que los Pisanob no decían a sus seguidores era que atrapaban las almas que salían de los cuerpos mortales. Confinaban a las almas capturadas en los cráneos de los anteriores sacrificios, obligando a los fantasmas a cumplir sus órdenes. Ya habían creado una verdadera red…