Le hablo al fin del silencio. ¿Puedes oír ya el trueno?
La Tierra tiene voz. Ya no mucha gente puede oírla. Hace mucho, todos oían esa voz: el latido de Vida y la canción de Espíritu. Sin embargo, el orgullo ha abierto brechas entre nuestro mundo y el reino espiritual. Es necesaria fuerza y visión para aferrarse a esa conexión primaria a pesar de todas las distracciones de la vida moderna… incluso más cuando el mundo moderno ha intentado todo cuanto está en su poder para quebrarte. Y aun así, esta Tradición y su gente rechazan ser quebrados.
Quizás aguante sea la mejor palabra para resumir la Sociedad de los Sueños. Su visión ha aguantado. Su gente ha aguantado. La propia Tradición ha aguantado ignorancia, esclavitud, división, opresión, traición, marginalización, estereotipos y una visión simplista por parte de los foráneos que igualmente ha perdurado mucho más allá de cualquier expectativa razonable. Aparte de los acérrimos aliados del grupo en las Tradiciones Verbena y Extática (y habitualmente incluyendo a éstos), el punto de vista del Concilio respecto a los Soñadores ha seguido siendo paternalista y condescendiente durante unos 500 años. Y aun así, ellos aguantan.
Resulta apropiado que esta Tradición no tenga un fundador sino dos. Tanto Naioba como Estrella-de-Águilas oyeron la llamada de sus espíritus en tierras muy distintas y, aun así, trascendieron sus diferencias para enamorarse el uno del otro. El matrimonio sagrado entre estos devotos femenino y masculino inspiró una confederación de visionarios africanos, nativoamericanos y asiáticos, ya que, aunque ese matrimonio era un ritual, el amor en él era real. Aunque su romance acabó con el asesinato de Naioba a manos de un Burlavisiones, ese amor, con todos sus lazos simbólicos, aún mantiene unido al grupo.
Salvo unas pocas excepciones, los Kha’vadi (“aquéllos cuya visión da forma al mundo”) provienen de culturas indígenas o de sus descendientes tecnológicos. Algunos abrazan modas y tecnologías actuales, mientras que otros prefieren sus costumbres ancestrales.
Aunque la Tradición cuenta con un puñado de artesanos espirituales europeos, oceánicos y asiáticos, la inmensa mayoría del grupo procede de África y las Américas. Pese a que a menudo los demás se refieren a ellos con la palabra siberiana chamán, ellos piensan en sí mismos más apropiadamente como hombres-medicina: gente que usa sus dones sanadores naturales en lugar de Magia egoísta. En vez de doblar la realidad a su voluntad, los Kha’vadi trabajan con la realidad… no la retorcida realidad del mundo Tecnócrata, sino con la realidad más profunda del Mundo Espiritual en sus muchas formas.
Gracias en parte a su naturaleza sanadora, esta Tradición ha sido estereotipada como un puñado de arcaísmos que tocan los bongos. Esa impresión es absurda. Los Kha’vadi son guerreros espirituales que luchan por salvar de sí mismo a un mundo enfermo. Especialmente en los últimos años, los Soñadores se han vuelto más militantes de lo que lo han sido durante siglos.
Grupos como la Lanza Roja y la Sociedad de la Rueda Fantasma desafían la imagen de “salvaje estoico” de la Tradición e incluso hay una facción aún más reciente, los Akinkanju (“No Rotos”), ejerciendo presión para deshacerse del “nombre de esclavo” del Concilio y reemplazarlo por un título que ellos mismos se den.
Después de todo, ésta es una “Pesadilla blanca” y los Contadores han tenido bastante. Algunas heridas han de purificarse con fuego. En estos días, una nueva perspectiva ofrece una nueva esperanza: Internet, una red de conexión global con su propio aspecto espiritual. Los Kha’vadi con cabeza para la informática se dan cuenta de que la Red Digital tiene consciencia… y por extensión, alma. Las herramientas prácticas de las redes sociales permiten a los Cuentasueños de todo el mundo encontrarse y reconstruir sus raíces, y el lado espiritual de la Red Digital nutre un movimiento tecnochamánico cuyas posibilidades y repercusiones van más allá de lo que nadie, ni siquiera los propios Contadores, pueda imaginar…
Organización: Aunque la Senda chamánica tiende a ser solitaria, los hombres-medicina pueden ser muy sociales. Y por eso, esta Tradición combina un respeto por la autonomía con la red de apoyo de una tribu. Durante siglos, muchos Cuentasueños han preferido errar en sus propios caminos; en años recientes, el grupo ha vuelto al enfoque centrado en la comunidad de muchas culturas preimperiales. Después de todo, la separación ha sido un lastre. Con vínculos fuertes entre ellos, los Contadores comparten una voz mayor.
En anteriores épocas, los Cuentasueños se encontraban en distantes rincones del mundo espiritual; incluso creaban reinos en los que las Viejas Costumbres permanecían intactas. Sin embargo, recientemente, los No Rotos han centrado su atención en el mundo material y se reúnen tanto en ambientes rurales como urbanos, normalmente en encuentros y powwows, espectáculos de hip hop, fiestas de barrio y festivales neotribales.
Los grupos de las redes sociales también proporcionan lugares de encuentro para la nueva raza de Cuentasueños. En todos los casos, la soledad previa ha cambiado a un enfoque más social. Incluso así, los Kha’vadi siguen siendo distintivamente informales. Los ancianos son respetados por sus pares más jóvenes, pero el vigor juvenil alimenta el futuro y se gana su propia clase de respeto.
Los interminables títulos que gustan al “Concilio Blanco” resultan estúpidos para el Contador medio. Las hazañas y la sabiduría hablan más alto que las leyes.
Iniciación: Como su Tradición, un Cuentasueños sobrevive a una muerte aparente. Parte de su iniciación implica una defunción ritual (a veces literal); dicha muerte lleva al chamán al mundo espiritual, donde se enfrenta a pruebas y desafíos. Asumiendo que sobreviva a esta ordalía, el Kaimi (“iniciado”) se convierte en So-cha (“discípulo”) y vuelve al mundo de los mortales con nuevas perspectivas y una visión mayor.
Esferas Afines: Espíritu; Fuerzas, Materia o Vida.
Foco: La medicina, no la Magia, es la esencia de las Artes de los Cuentasueños. Un avatar es Howahkan: la misteriosa voz que habla a aquéllos que están listos para oírla. La hechicería es una Senda egoísta y en última instancia destructiva que aleja a la gente del Buen Camino de la armonía con el Mundo Espiritual. Para llegar más allá de las ilusiones de la vida mortal, uno debe escuchar el latido de la Creación, enfrentarse a la muerte y permanecer abierto a la voz por medio de la que habla toda la vida. Los Contadores entrenados prefieren la medicina, la artesanía, el chamanismo, la sabiduría loca y la fe. Unos pocos se dedican a la cibernética, el yoga, el vudú y la brujería, pero sus compañeros suelen rehuirlos.
Los paradigmas comunes incluyen: Un Mundo de Dioses y Monstruos, la Creación Es Divina y Está Viva, Traer de Vuelta la Edad Dorada y, a veces, el Poder Da la Razón.
Estereotipos
- Tradiciones compañeras: A pesar de todas sus admirables cualidades, confío en las que debo, considero a muy pocas de ellas mis amigas y mantengo abiertos los ojos en busca del próximo error inevitable.
- La Tecnocracia: La esencia viva de la Pesadilla blanca.
- Los Dispares: Siento un truco aquí, y creo que me gusta…
Espiritistas, amigos de los animales, hermanos del viento y hermanas de la Tierra: estos magos caminan por las fronteras entre el mundo físico y los reinos oníricos y adquieren técnica y sabiduría de los espíritus de la tierra, el cielo y el agua. Los Cuentasueños suelen ser encasillados, acertadamente, como chamanes. Son los intermediarios entre la humanidad y el Espíritu, comunican los dos mundos, manteniendo el equilibrio y conservando las relaciones entre los habitantes de ambos reinos en su adecuado estado de flujo o inmovilidad. Los Cuentasueños tienen el papel más difícil y la influencia más concentrada y fundamental de las Tradiciones.
TRASFONDO:
Al principio había en todos los lugares personas que conocían el camino para pasar a los territorios del espíritu y comunicarse con el tótem, los protectores de la tribu o los espíritus ancestrales. Estas personas compartían su saber con sus tribus o familias y eran los magos o hechiceros de su grupo. No hablaban de los otros caminantes de sueños con los que se toparon en los reinos espirituales y normalmente no se juntaban en grupos. Cuando la Convocatoria llamó a todos para formar las Tradiciones, los magos reconocieron que estas personas tenían que ser parte de la alianza que se estaba formando, a pesar de su apariencia primitiva. Los chamanes que acudieron a la llamada se convirtieron en los primeros Cuentasueños.
Estos Cuentasueños que ingresaron en las Tradiciones encontraron razones para arrepentirse. Desde el principio las Tradiciones eurocéntricas, llevadas por los prejuicios de la Orden de Hermes metieron a los variados grupos espirituales en el mismo saco. Los europeos no iban a tomarse la molestia de entender los «primitivos e inferiores» caminos de los muchos forasteros y los etiquetaban como Cuentasueños. Por su parte los Cuentasueños encontraron a las Tradiciones egoístas, avariciosas y hambrientas de poder, indiferentes hacia los aspectos sublimes de la espiritualidad y casi tan nocivos como la Orden de la Razón. Sólo la rotunda visión de la aniquilación por parte de la ciencia de sus culturas mantuvo a los Cuentasueños vinculados al Consejo, pero ni siquiera esto fue suficiente: hacia el siglo XVIII estaban tan marginados por los Tradicionalistas que toda una mitad de la delegación se marchó para volver a sus pueblos de origen. Este cisma dio lugar al fallecimiento de muchos Cuentasueños y a una escisión, que aún no se ha subsanado, entre esta Tradición y el Consejo. Hacia la Edad Contemporánea los Cuentasueños se han dado cuenta de que sólo podrán sobrevivir con la ayuda del Consejo, aunque éste haya hecho oídos sordos a sus requerimientos durante mucho tiempo. La profecía dice que el Consejo aprenderá de sus errores, y que, al final, llegará a aceptar a los Cuentasueños, aunque probablemente no sea a tiempo para salvar todo lo que los Soñadores aprecian.
Probablemente los Cuentasueños, entre todas las Tradiciones, son los que menos cambios han sufrido. La mayoría de los miembros del grupo siguen venerando a los antiguos espíritus, los viejos ritos y los lugares sagrados y recuerdan los nombres de los dioses y los rostros de las leyendas. La poderosa historia oral junto a las vívidas artes del sueño les permiten conservar un importante conocimiento heredado de sus métodos e incluso algunas facciones se ven como reencarnaciones de grandes chamanes o personificaciones de espíritus encarnados. Con tambores y fuego, cánticos y fetiches, los Cuentasueños se introducen en el mismo Sueño antiguo que los ha guiado en la eternidad.
El papel de los Cuentasueños se ha hecho más difícil últimamente puesto que resulta mucho más arduo traspasar la Celosía, la cortina que separa el mundo físico del espiritual. En las ciudades y lugares donde impera la incredulidad es casi imposible pasar a los mundos espirituales. Hasta en las arboledas y desiertos sagrados cuesta más esfuerzo que nunca entrar en el sueño. Los Cuentasueños mayores están preocupados por este cambio, y los jóvenes ven flojear su espíritu de concilio cuando se juntan para discutir cual es la mejor manera de tratar este nuevo problema.
ORGANIZACIÓN:
El chamanismo no está limitado a los nativos americanos o a los aborígenes africanos. Cada cultura de la Tierra tiene algunas personas que pueden comunicarse con los espíritus de su territorio, y cada uno lo hace de maneras diferentes, aunque todos sienten un amor profundo hacia su hogar, tanto si llaman así a la Tierra entera o solo a un rincón de ella. Muchos magos de esta Tradición son conservadores activos que buscan preservar lo que queda del terreno salvaje e incluso reclamar algo del territorio que ya se ha desarrollado. Su conexión con los espíritus generalmente aparece por sí misma cuando los magos son jóvenes, a veces bajo la forma de imaginarios amigos animales, o empieza a manifestarse en la pubertad del mago. Muchos jóvenes Cuentasueños salen en busca de alguien que puede enseñarles a comprender sus visiones y dar sentido a sus vidas.
Cuando los primeros Cuentasueños llegaron al Concilio, el liderazgo todavía no era demasiado oficial, En el mejor de los casos, la Tradición ha estado vagamente organizada, otorgando el mando a sus miembros más respetables, por un acuerdo casi tácito. Las reuniones en las que participa la Tradición entera son raras. Antes de que la Celosía se reforzara estos encuentros tenían lugar en el mundo espiritual, con los tótems y los espíritus ancestrales asistiendo y aportando su sabiduría. Sin embargo, ahora los Cuentasueños se reúnen en el plano físico haciendo saber a los otros el lugar y la fecha del encuentro mediante sueños y visiones.
FACCIONES:
Los Cuentasueños se manifiestan en diferentes facciones que son distintas formas de espiritualismo o chamanismo. Entre ellos están:
Los Guardianes del Fuego Sagrado, que son en muchos sentidos los Cuentasueños que mejor representan a esta Tradición, permanecen en sus culturas nativas para mantener sus raíces con vida. Aceptan que el mundo ha avanzado, pero siguen manteniendo la herencia y las prácticas originales de sus hogares.
Los Solitarios son aislacionistas que se retiran a los lugares desolados de la Tierra, donde sobreviven en comunión con la tierra. Hacen grandes esfuerzos para separar el Sueño del mundo moderno que podría destruirlo. Muchos llevan a jóvenes iniciados a lugares desérticos para enseñarles a través de la búsqueda de visiones y que luego vuelvan a sus sociedades nativas y las guíen en el camino hacia los Sueños.
La radical Sociedad de la Rueda Fantasma defiende que el mundo moderno es simplemente el progreso natural del mundo y que los Cuentasueños deben aprovecharse de las consecuencias del sistema. Buscan los espíritus en la tecnología y en los símbolos subyacentes. Los tecno-chamanes de la Rueda Fantasma se aprovechan de la tecnología y de sus beneficios, pero los unen a su propia visión de la espiritualidad. Naturalmente, son tratados, como poco, con recelo por muchos otros miembros de la Tradición.
Los activistas y guerreros más abiertos constituyen la Sociedad de la Lanza Roja, que incluye a aquellos Cuentasueños que abandonaron el Concilio de la Tradición pero que sienten el deseo de permanecer en contacto con el resto de aliados. Estos extremistas hacen la guerra directamente a sus opresores visibles y se revuelven contra cualquiera que pudiera destruir su modo de vida. Dirigen sus energías primordialmente contra la Tecnocracia, pero atacan a las Tradiciones e incluso a los Durmientes de conducta egoísta e insensible cuando dicta la necesidad.
Por último los narradores errantes del Baruti mantienen con vida los viejos mitos y leyendas. Antes de que la ciencia explicara el mundo, ya había narraciones que hablaban de la creación, los descubrimientos, el amor y las desgracias. Los Baruti retienen estas historias y también memorizan el nuevo saber de los modernos Cuentasueños. Manteniendo viva la tradición y el saber de los antepasados, los Baruti guardan muchos secretos y conservan una visión diferente del mundo sin formar, antes de la llegada de la ciencia. Como ellos dicen, incluso aunque las historias no puedan ser verdaderas, así fue como sucedieron las cosas.
FILOSOFÍA:
En este mundo hay infinitas más cosas de las que se pueden tocar. Más allá de los límites de la visión hay seres que han estado con nosotros durante la eternidad y que están estrechamente relacionados con el funcionamiento y la salud del mundo. Los Cuentasueños son conscientes de este hecho y honran a los espíritus. Son guardianes del paso entre los dos planos, haciendo de comunicadores y mediadores. Si cualquiera de los dos lados de la Celosía está desatendido, ambos lo sufrirán, por eso los Cuentasueños equilibran las dos partes. Lograr el equilibrio requiere a veces que el mago desempeñe acciones que parecen irrelevantes o triviales; otras veces el mago debe hacer un sacrificio para mantener el mundo en armonía. Demasiadas personas han olvidado la existencia de los espíritus de la tierra, por eso los Cuentasueños deben siempre recordársela a ellos mismos y a los demás.
FALLOS:
El chamanismo es una profesión solitaria casi por definición: no hay viajes en grupo por el mundo del espíritu. Los Cuentasueños sufren esta ausencia de cohesión, ya que como no hay una verdadera identidad de grupo, tampoco hay metas comunes o movimientos coordinados hacia un único fin. El potencial de la Tradición está repartido en muchos recipientes pequeños, en lugar de estar contenido en un canal mayor y más eficaz. Por otro lado, los Cuentasueños se dedican en alguna medida a contrarrestar el fortalecimiento de la Celosía, la otra debilidad que atormente a la Tradición. Con un acceso al mundo espiritual tan limitado, los magos-chamanes no pueden disponer de gran parte de su fuerza mágica. La incapacidad de los Cuentasueños para comprenderse los unos a los otros, a pesar de su reunión en una única Tradición, agrava su pérdida. Aunque todos veneran y trabajan por un mayor equilibrio en el mundo, sus métodos son tan intuitivos y variados que no pueden trabajar juntos eficazmente.
TEORÍAS Y PRÁCTICAS:
Todos los Cuentasueños escuchan en sus corazones la voz del mundo, su pulso invisible, la agitación de los espíritus, el ritmo de la naturaleza y el poder latente de la Gran Tierra. Algunos escuchan a tótems, otros a caprichosos espíritus de lugares naturales y otros comulgan con el espíritu moderno del hombre, los símbolos y líneas que inspira la tecnología. Pero en todos los casos, la magia procede del Sueño, sea cual sea su nombre concreto. Los Cuentasueños sacan fuera las imágenes y arquetipos conocidos inconscientemente por toda la humanidad. La palabra «primitivo» no es ni ha sido nunca apropiada para describir a estos magos. Pueden usar métodos que usaban las sociedades pre-tecnológicas para comunicarse con cosas que las otras personas no pueden ver, pero su enraizamiento en la realidad y el mundo moderno es sorprendentemente fuerte. Para comprender lo que pasa en los Reinos Oníricos y para interpretar los mensajes de los espíritus, los Cuentasueños tienen que estar íntimamente familiarizados con el funcionamiento del mundo físico. Además, no es bueno para nadie que un chamán de Alaska tenga un mensaje de un Durmiente de Venezuela y no pueda coger el teléfono o utilizar el e-mail para comunicarse.
Con un pie en este mundo y otro más allá de la Celosía, los Cuentasueños tienen una comprensión única de las consecuencias de sus actos: no sólo ven lo que pasa entre la gente y en las sociedades, sino que también sienten los efectos causados en el mundo espiritual, que casi siempre son más duraderos. Esta visión confiere a la Tradición un profundo sentido del deber hacia los Durmientes, los Despertados y los espíritus con los que están en contacto. Con el peso del destino de dos mundos sobre sus hombros los Cuentasueños saben que deben elegir cuidadosamente y con buen juicio al tomar decisiones.
Esfera especial: Espíritu.
Focos habituales: Percusión, Cánticos, Fuego, Mandalas, Pinturas en la Arena, Huesos, Amuletos, Hierbas.
Conceptos: Domador, Chica Urbana Consumista, Mediador, Intérprete de Sueños, Ecologista, Naturalista, Chamán, Tecnofetichista, Vagabundo.
Estereotipos:
-Adeptos Virtuales: Ven el sueño, pero buscan rehacerlo con sus imágenes.
-Coro Celestial: Es verdad que todos los espíritus son Uno, pero no por ello su visión del Uno es verdadera.
-Culto del Éxtasis: La sabiduría se deriva del propósito; deben encontrar una razón para romper las ataduras, o la experimentación no tendrá sentido.
-Eutánatos: Los Espíritus Oscuros guían sus manos, pero actúan con una gran responsabilidad sin quejarse.
-Hermandad Akáshica: Empiezan por el cuerpo, cuando deberían empezar por el espíritu.
-Orden de Hermes: Su supuesto Arte puede dominar el espíritu, pero no el alma.
-Hijos del Éter: Las máquinas no sueñan.
-Verbena: Son nuestros hijos e hijas, pero dejan que la carne mande sobre el espíritu.
-Seres Huecos: Su tristeza no tiene el fundamento de nuestro pasado de persecuciones. Deben aprender que los demás pueden tener más problemas que ellos y, entonces, aceptar el mundo exterior.
«Tengo un mensaje para ti.
No es para tus oidos, es tu corazon el que debe escuchar y tu espiritu sabra que es cierto.
¿Quieres oirlo?