Las Furias del Medioevo Oscuro son criaturas de largos colmillos que habitan en los bosques salvajes y defienden ferozmente las antiguas tradiciones paganas. Llevan siglos observando con atención la expansión de la Iglesia cristiana, que consideran que es un instrumento del Wyrm. Aunque algunas Furias Negras prefieren aleccionar sutilmente a sus pupilos humanos predicando la palabra de Gaia a través del evangelio de la Virgen María, cada vez son más las que consideran que para detener las codiciosas garras del Patriarca es necesario derramar sangre.
Resulta bastante irónico que esta sangrienta actitud se invierta tan pronto para dar caza a las Furias Negras. Cuando comenzó el fervor de la Inquisición, las historias que afirmaban que las Furias eran brujas cambiaformas animaron a la Iglesia a iniciar su sangrienta caza de brujas. Los ritos de Gaia más gentiles y sagrados han sido condenados como herejías y está llegando el momento de que gran parte de la Parentela de las Furias y sus aliados sean quemados en la hoguera.
Decididas a mantener el conjunto tribal totalmente integrado por mujeres, las Furias Negras han asesinado a todos los niños varones nacidas de ellas (aunque a los niños nacidos en la Parentela se les permite sobrevivir). Ahora están divididas, pues algunos de sus miembros consideran que esta práctica es antieconómica, absurda y cruel. Esta minoría creciente permite que sus hijos varones vivan, para que algún día puedan pasar la sangre de las Furias Negras a sus hijas. Las Furias observan con preocupación a estos niños y sus descendientes. Los antiguos de los Hijos de Gaia y los Caminantes Silenciosos han aceptado hacerse cargo de cualquier cachorro macho que muestre indicios de experimentar el Cambio.
Una de las pocas excepciones de esta ley es la de los metis. De vez en cuando, una Furia rompe el primer dogma de la Letanía y da a luz a un cachorro macho metis. Aunque algunos antiguos los discriminan, considerando que un cuerpo deformado tiene que albergar un espíritu deformado, las Furias consideran que no se debe castigar a un niño por el pecado de su madre. De cuando en cuando la línea se difumina aún más y los cachorros macho que normalmente habrían sido asesinados continúan con vida. Aunque el razonamiento varía según cada situación (después de todo estos casos se dan con muy poca frecuencia), las Furias Negras suelen decidir que un metis macho, criado necesariamente en el clan, tiene más oportunidades de crecer siendo receptivo con la Madre. Ningún metis de las Furias Negras se ha desviado hacia el Patriarca.
Territorio: Aunque reclaman Grecia como patria natal, las Furias Negras se mueven por todo el sur de Europa. Poseen territorios en las ciudades estado de Italia y están representadas en muchos de los clanes multitribales más importantes de Francia, Bizancio e Iberia. Sin embargo, pocas han sido capaces de establecerse en el Norte de Europa o en Bretaña, donde los Fenrir y los Fianna, tribus dominadas por los machos, se oponen a su presencia. De hecho, en el Medievo Oscuro, cuando las Furias errantes avancen por Europa para conocer mejor el territorio, se iniciará en pleno florecimiento de la rivalidad entre las tribus de Fenris y Pegaso.
Los túmulos de las Furias Negras suelen situarse en el corazón de las zonas salvajes, lejos de las tierras que han sido trabajadas por los hombres. Según la leyenda de las Furias Negras, la propia Artemisa (una de las caras de Selene) ordenó a la tribu el cuidado de las zonas más salvajes. Además, diversas Furias consideran que el desequilibrio de la Tríada sólo podrá evitarse reforzando al Kaos…¿y qué mejor que una tribu de mujeres para alimentar la fuerza de la vida y la creación? Como resultado, las Furias visitan a su Parentela humana con poca frecuencia, recorren diversos kilómetros en forma de lobo para mantenerse informadas, procrean cuando es necesario y llevan al clan a todos los nuevos miembros que acaban de experimentar el cambio.
Las Furias Negras creen que la procreación es un don y deber sagrado, de modo que escogen cuidadosamente a los padres de sus hijos. Algunas de las más extremistas solo se aparean con lobos, evitando de este modo todo contacto con los hombres humanos, que suelen ser cortos de miras. Otras mantienen pequeñas dinastías de Parentela, para incrementar las posibilidades de que sus hijos sean Garou. Existe una pequeña minoría de Furias Negras que buscan una relación que se base verdaderamente en el amor, aunque la mayoría considera que su papel es el de guerreras, no el de esposas.
Campos: Las Amazonas de Diana y las Bacanantes existen desde hace tanto tiempo como los hombres abusan de las mujeres; ambos campos sienten un eterno rencor hacia la Iglesia. Las Saqueadoras también conservan toda su fuerza en ésta época y están más preocupadas por descubrir fetiches y artefactos de poder que por proteger las áreas del Kaos… porque el Kaos todavía es fuerte. El Templo de Artemisa continua conservando las tradiciones y rituales de la tribu, tal y como ha hecho desde la época de las Primeras Hijas.
En cambio, las Hijas de la Luna o la Hermandad Femenina todavía no existen. Las Hijas de la Luna se alzarán cuando las mujeres empiecen a tener tiempo libre y sean receptivas a la educación… y el tiempo libre está a muchos siglos de distancia. De forma similar, la Hermandad surgirá como una respuesta a la Inquisición (que todavía no se ha levantado) cuando el papel de los vampiros (y, en algunos casos, los actos militantes de las Furias) provocará una persecución categórica por parte de la Iglesia.
El campo más característico de las Furias medievales es la Orden de Nuestra Madre Misericordiosa, que sobrevivirá hasta el siglo XX. Este campo recién fundado no trata a la Iglesia como a un enemigo, sino como a un posible aliado. Las hermanas de la Orden intentan cambiar la Iglesia desde su interior y reforzar el amor por la Madre a través de ésta. Hacen hincapié en la gracia de la Virgen María y suelen aliarse con los reformadores religiosos de los Hijos de Gaia y otras tribus. Es una orden muy popular y sus miembros se están multiplicando; cada vez hay más Furias Negras homínidas que aprenden la doctrina de la Iglesia durante la infancia. Pero tristemente, la existencia de este campo irrita a las Amazonas de Diana, por lo que suelen estallar frecuentes conflictos sangrientos entre ambos campos. Las hermanas de la Orden pueden escoger el Roce Materno como si fuera un don de las Furias.
Aliados y enemigos: Las Furias Negras no tienen demasiados aliados en las tribus; en esta época opresiva, sus esfuerzos por mejorar la condición de las mujeres las ha llenado de resentimiento y no son exactamente propensas a entablar amistades. La ayuda sobrenatural que puede recibir un clan de Furias Negras suele proceder de las brujas y las adivinas de la zona, hechiceras que prefieren las tradiciones paganas a las de la Iglesia y saben que sus esfuerzos persiguen el mismo objetivo que las Furias. Sin embrago, estas alianzas son esporádicas; las brujas astutas saben que no deben mostrarse de improviso ante una manada de hombres lobo sedientos de sangre, y las Furias no están demasiado dispuestas a buscar aliados en el exterior de la nación Garou. Sólo la Orden de la Madre Misericordiosa tiene una mentalidad suficientemente abierta como para aceptar de buena gana estas alianzas, aunque tiende a buscar aliados dentro de la Iglesia, no fuera.
Las hadas evitan en la medida de lo posible a las Furias Negras, debido a los amargos encuentros del pasado. A la Buena Gente siempre le ha gustado visitar a los mortales y… jugar con ellos durante cierto tiempo para entretenerse. Desgraciadamente, las Furias Negras sienten un odio brutal hacia todo aquel que es desconsiderado con su Parentela. Como resultado, ni siquiera el sátiro más temerario osaría poner los pies cerca del baun de las Furias Negras, pues todos saben perfectamente qué hicieron las Furias Negras con los suyos en el pasado.
Aunque las Furias Negras suelen tener acalorados debates para decidir si la Iglesia mortal representa o no una amenaza, no cabe duda de que los vampiros y otros monstruos disfrazados de clérigo son sus enemigos. Las Furias Negras desean vengarse de los siervos del Wyrm que se esconden en la Iglesia y utilizan sus dogmas para sus propios fines. Sin embargo, esto no significa que solo se centren en las amenazas cristianas (o falsamente cristianas), pues siempre se han esforzado por exterminar a las Perdiciones y a los monstruos del Wyrm que atacan a las mujeres, como los Liderci húngaros o los dementes fomori del Wyrm Profanador. Incluso los súcubo, los Enticer y otros demonios que adoptan forma de mujer son enemigos de la tribu; después de todo, estas criaturas contribuyen a que los hombres medievales tengan un mal concepto de las mujeres medievales. Las Furias tienen un largo camino que recorrer en su lucha… y con la Inquisición en el horizonte, todavía no se han enfrentado a lo peor.
Trasfondos: Sin restricciones.
Dones iniciales: Sentidos Agudizados, Piel de Hombre, Sentir el Wyrm.
Estereotipos:
- Caminantes Silenciosos: Viajeros que conocen bien la sabiduría antigua y las noticias del mundo. Sería bueno que se sintieran bien recibidos en nuestros túmulos.
- Colmillos Plateados: Una vez fueron nuestros respetados hermanos, pero una gran parte de su Parentela se ha unido a las fuerzas del Patriarca. No podemos permitir que pierdan de vista los planes de Gaia.
- Fenrir: Arrogantes e ignorantes. Es cierto que no les resulta extraña la batalla, pero esto solo consigue aumentar sus deseos de conquista.
- Fianna: Intentan proteger a los humanos de las zarpas de hierro de la Iglesia, pero se pierden con tanta bebida y tantas canciones.
- Garras Rojas: Una tribu noble y fiel con la Madre. Si tuvieran descendencia con los humanos, serían doblemente sabios.
- Hijos de Gaia: Sus corazones están en el lugar correcto, pero no pueden ver la guerra que les rodea.
- Protectores: Abrazan las frías ciudades antinaturales que adoran al Patriarca de la Iglesia. El mejor lugar en el que pueden estar es sobre sus rodillas, clamando misericordia.
- Roehuesos: Tienen mucha más fuerza de lo que la mayoría sospecha, pero la rata les obliga a rechazar a los humanos.
- Señores de la Sombra: Una tribu de acertado nombre que se ha perdido cerca de las partes más oscuras de la tierra. No necesitamos aliados tan desesperadamente como para tener que deberles algo.
¿Qué es esto, hombre del rey? ¡Parece que has tirado la espada! ¿Acaso me temes? ¿Acaso eres incapaz de acabar con una mujer de más de trece años? ¡RESPONDE!